Fabes verdines con bacalao, chamón con maíz y manzana y de postre cuajada de apio. Ese es el menú que el dos estrellas Michelín Nacho Manzano ha preparado para hoy en el HUCA (Hospital Universitario Central de Asturias). Lo comerán los pacientes ingresados, adaptado a sus necesidades dietéticas, y mañana se servirá en las tres cafeterías del complejo sanitario.

Los endocrinólogos Francisco Villazón y Edelmiro Menéndez, están convencidos de que una buena comida ayuda a la recuperación de los enfermos y ayer, en la presentación del menú de Manzano, se mostraban orgullos de la colaboración con el "chef" asturiano. "No todos los días se trabaja con un maestro de la cocina", puso en evidencia Villazón.

Nacho Manzano se ha adaptado a la planificación semanal de las comidas del HUCA -hoy era día de alubias y carne- y les ha dado un toque "de fiesta", utilizando productos asturianos y técnicas de preparación un poco especiales. Los días de preparativos previos le han resultado "muy amenos" y ayer reconocía estar impresionado por el equipamiento de las cocinas y la profesionalidad del personal del mayor centro hospitalario de Asturias. "Se come muy bien aquí, me consta", comentó. Hoy, su propósito es llevar "un poco de alegría al paciente a la hora de la comida". "La cocina rica va siempre de la mano de lo sano", opina. No es la primera vez que Nacho Manzano cocina para un hospital: ya lo ha hecho antes en Cabueñes y en Arriondas.

Ana María Cachero, la jefa de cocina del HUCA, asegura que trabajar codo con codo con Nacho Manzano ha "sido un reto muy bonito" y que, para los enfermos del HUCA, "la comida puede introducir un poco de ocio en su rutina". Alfonso Pandiella, el jefe del servicio de Hostelería, dio algunas cifras. Setecientos de los algo más de novecientos enfermos ingresados en el hospital comerán hoy el menú de Manzano; no todos podrán degustar los tres platos, algunos se tendrán que conformar con uno solo. Todo depende de sus necesidades nutricionales.