Los tres socios del equipo de Gobierno, PSOE, Somos e IU, salieron ayer en bloque a lamentar el nuevo roto económico que la sentencia del Calatrava deja en las arcas municipales y a identificar a los culpables de la situación: "los años negros del PP de Gabino de Lorenzo y Agustín Iglesias Caunedo". El tripartito cuantificó en 70 millones de euros los "pufos y chapuzas" del PP que el actual equipo de gobierno lleva abonados y alertó de que la cuenta todavía puede incrementarse con asuntos pendientes como el Spa del Naranco o el Mercado de la Corredoria.

El Alcalde, Wenceslao López, la primera teniente de Alcaldía, Ana Taboada, y los portavoces de IU y PSOE, Iván Álvarez y Ana Rivas, ofrecieron una rueda de prensa a las cuatro de la tarde en la que expresaron distintas variantes de una misma denuncia: El PP se dedicó a "colgarse medallas un día sí y otro también por sus grandes obras que han resultado ser grandes pufos, doblemente". Lo son, según el Alcalde, por las facturas que acaba generando y por los desperfectos que obligan a invertir en ellos. "Obras que no sirven para nada o de utilidad ínfima".

70 millones de lágrimas

Ante ese panorama, razonó Ana Taboada, sólo cabe una respuesta, la indignación. La primera teniente de Alcaldía hizo "un llamamiento a la ciudadanía para que se indignen". "Ya sea en los tribunales o de manera política, tiene que haber una respuesta de la ciudadanía para conseguir un Oviedo mejor", defendió.

El portavoz de IU, Iván Álvarez, hizo, por una vez, las cuentas de la vieja y enumeró la factura dejada, de momento, por el PP: 1,8 millones de los planes de empleo, 35 millones de Villa Magdalena, 2,6 por las expropiaciones de Rodríguez Cabezas, medio millón por las de Loma del Canto, 3 millones por las sentencias de colaboración social, un millón por las reformas que hay que introducir en el Auditorio para adaptarlo a la legalidad, dos millones para reparar la Losa, otros dos para adecuar el Tartiere y los 20 conocidos esta semana del Palacio de Congresos. Son unos 70 millones de euros que repercutirán en el bolsillo de los ovetenses, "como setenta millones de lágrimas que se caerán de las cartillas bancarias de los ciudadanos", remató poético el concejal.

La portavoz del PSOE, Ana Rivas, también echó mano de metáforas muy llamativas para hacer un resumen de la situación. El PP, explicó, "estuvo años haciendo obras sin sentido, sin estudio, gastando millones y millones por unas obras que son una pura chapuza". No sólo por los sobrecostes, contó, sino por las inversiones a las que está obligando, para adecuar proyectos mal diseñados. "Han convertido el Ayuntamiento en 'Esta casa es una ruina'".

El Alcalde tuvo un pequeño recuerdo, en forma de lamento, para los artículos que durante años publicó en LA NUEVA ESPAÑA, denunciando la llamada operación de los Palacios. "Y lamento profundamente la paradoja de que lo que denuncié como ciudadano me toque ahora mandarlo pagar como Alcalde, preferiría haberme equivocado", se quejó con amargura.

En las conclusiones finales, el tripartito también apuntó la posibilidad de buscar nuevas vías judiciales para pedir responsabilidades a los populares, aunque recordó que los procesos penales abiertos en su día quedaron en nada y la operación de los Palacios no tuvo recorrido en los tribunales.