"Han sido robados cuadros y libros. Son vuestros y nuestros recuerdos y además es propiedad privada". A seis días del cierre definitivo del Ca Beleño, los dueños y creadores del concepto, un bar convertido en cuna de la cultura celta en Asturias a lo largo de tres décadas, se han visto obligados a retirar de las paredes "todo lo susceptible de ser sustraído ilegalmente". El inicio de la cuenta atrás abrió el camino al pillaje de fetiches, aunque también hay quien, a través de las redes dice que le gustaría "tener algo vuestro, comprándolo, por supuesto".
