Efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (Seis) del Ayuntamiento de Oviedo extinguieron ayer de madrugada las llamas que calcinaron un Ford Fiesta en la calle Pepín Rodríguez de Colloto poco antes de las siete de la mañana. Según fuentes policiales el vehículo había sido robado a un vecino de Noreña registrado como propietario del mismo.

La dimensión de las llamas alertó a los vecinos, que llamaron a los servicios de emergencias locales a las 6.45 horas. Minutos después, los efectivos llegaron al lugar y lograron apagar rápidamente las llamas, pero no evitaron que el turismo sufriera daños muy graves.

Las pesquisas realizadas primero por la Policía Local y luego por la Guardia Civil permitieron determinar que el vehículo había sido sustraído a un vecino de Noreña. Las investigaciones apuntan a que los ladrones decidieron quemarlo tras utilizarlo durante toda la noche.

Los vecinos aseguran que no se trata del primer caso similar en la zona. "Ya han ardido más coches en el mismo sitio que curiosamente habían sido robados", declara una vecina, preocupada porque ese punto se convierta en un lugar habitual de quemas para los cacos.