Al final, la sangre no llegó al río. A la salida de la reunión entre Real Oviedo y Ayuntamiento, celebrada esta tarde. no hubo siquiera rasguños. A pesar de que el club había anunciado un encuentro tenso, el presidente del Oviedo, Jorge Menéndez Vallina y el Alcalde, Wenceslao López, escenificaron las paces entre la administración local y el equipo de la ciudad y redujeron la polémica de los últimos días a "un problema de comunicación".

Sin querer entrar en muchos más detalles, Wenceslao López, admitió la tesis de Vallina de que "la liga tiene otros tiempos" que no se corresponden con los de la administración. "Es verdad que lo que al Oviedo le lleva un día a nosotros nos puede llevar un mes", reconoció el regidor ovetense, que dijo "comprender" las necesidades del club.

López también anunció arreglos en el Tensi para mejorar las condiciones del trabajo de la cantera y una tasación de las marcas del Oviedo para que el club valore si finalmente las recompra.