La Ópera de Oviedo perdió en la temporada 2017/2018 un total de 684 espectadores respecto al ciclo anterior. Además, el número de abonados a los cinco títulos descendió también en 18 personas. Aún así, los ingresos por la venta de entradas en taquilla de la temporada, que se cerró el pasado mes de enero con "Pelléas et Mélisande", fueron superiores. Concretamente, la recaudación subió en 28.443 euros, un 6,45 por ciento más que el año anterior.

Para la próxima temporada, la que se inicia en septiembre, se estima que tanto el número de espectadores como los ingresos sean superiores, debido a la programación de dos títulos con mucho tirón, "Carmen" y "Tosca", y el estreno de "Fuenteovejuna".

El presupuesto previsto para la próxima temporada es de 2.725.114 euros, a los que habrá que sumar los 50.000 euros pendientes de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado y comprometidos ya para el ciclo.

Son los datos ofrecidos ayer en la asamblea de la Fundación Ópera de Oviedo en la que su presidente, Jaime Martínez, apuntó que "a pesar de que los efectos de la crisis empiezan a remitir, la institución sigue viviendo momentos difíciles". Martínez agradeció el apoyo del Ministerio de Cultura, del Principado y del Ayuntamiento de Oviedo, pero volvió a pedir "un esfuerzo por parte de la Consejería de Cultura del Principado de Asturias equiparable al peso de la actividad y repercusión de la actividad operística en Oviedo".

Martínez destacó como un logro la política de acceso a la ópera para los jóvenes y mostró su satisfacción por los resultados de las políticas de descuentos a menores de 26 años".