Un día después de que el Alcalde de Oviedo, Wenceslao López, anunciara que el Ayuntamiento va a encargar una tasación de las marcas del Real Oviedo para que el club pueda optar a recomprarlas, la teniente de Alcaldía y líder de Somos, Ana Taboada, terció ayer en las negociaciones y anunció que en ningún caso el Ayuntamiento se plantea "hacer negocio".

Aunque Taboada no habló de cifras, como tampoco habían hecho el miércoles Wenceslao López ni el presidente del Oviedo, Jorge Menéndez Vallina, dejó claro que la administración no pretende ganar dinero con las marcas del Real Oviedo, que el club les vendió por 3 millones de euros en 2009. Desde entonces, la entidad deportiva paga 60.000 euros al año por usar las marcas mediante un convenio que se renueva anualmente y que en este momento estaría pendiente de renovación.

En medio de una rueda de prensa para hacer balance de la concejalía que dirige, la de Participación, Taboada quiso recalcar que la tasación no tiene como objetivo ninguna operación extraña en torno al Real Oviedo. Y aprovechó para sacar a relucir los conflictos del pasado entre el PP y el equipo de fútbol: "Todos recordamos", declaró, "lo que pasó en 2003; cuando el equipo de Gobierno quiso intervenir en el club con el desastre que eso supuso". Y remató la reflexión con un "nosotros garantizamos que no va a pasar eso".

Más allá, Taboada quiso reafirmar la confianza que el Real Oviedo tiene en el tripartito ("el club sabe que tiene todo el apoyo del Ayuntamiento") y pidió "tranquilidad" y "estabilidad" con el objetivo de "concentrarse en subir a Primera".