El empresario ovetense acusado de aprovechar un concurso de acreedores para comprar 900.000 euros de materiales a otra empresa, a sabiendas de que no los podría pagar, negó ayer los hechos ante la sección segunda de la Audiencia Provincial, al igual que su hermana, para la que también solicitan condena en calidad de cómplice.

Los acusados, para los que piden cuatro y un año de cárcel respectivamente, rechazaron haber falseado las cuentas engordando la cifra de dinero pendiente de cobro y las existencias, aunque reconocieron "posibles errores".

Hoy se reanuda el juicio con la declaración de varios testigos.