El programa municipal "Escolinos de Babel" con el que el Ayuntamiento trata de facilitar la integración de niños inmigrantes sin escolarización previa, contó este año con cien alumnos procedentes de diferentes países africanos, latinoamericanos y de Europa del Este.

La iniciativa contó en esta ocasión con un presupuesto de unos 52.000 euros, un 50% más que el curso anterior, y la concejala de Atención a las Personas, la socialista Marisa Ponga, defendió la necesidad de esta apuesta para "velar por el bienestar" de los niños inmigrantes" y generar "espacios de socialización" con alumnos en una situación similar.

La principal función de este programa es ofrecer actividades complementarias a pequeños llegados desde otros países y que desconocen el castellano o no tuvieron la oportunidad de ser escolarizados en su lugar de origen para ayudarles a integrarse en el sistema educativo español.