El pasado 27 de marzo, el alcalde de Oviedo, el socialista Wenceslao López, y la concejal de Infraestructuras, Ana Rivas, visitaron el barrio de Ciudad Naranco para anunciar que las obras de asfaltado de 16 calles del barrio habían acabado, pero mes y medio después "aún faltan muchas cosas por hacer". Al menos eso es lo que sostiene el presidente del colectivo Ciudad Naranco Existe, Rubén Fernández, que le exige al Consistorio celeridad para rematar unos trabajos que se iniciaron a mediados de enero con un plazo de ejecución de dos meses. "Esto es una vergüenza. Hay zonas que están sin acabar y tenemos los restos de la obra tirados por el barrio. Lo han dejado todo a medias", afirma.
Los vecinos ponen la calle Montes del Sueve como ejemplo de la "ineficacia" del Ayuntamiento. El tramo de la vía que discurre paralelo al colegio Santa María del Naranco ha sido modificado por completo y se han habilitado una especie de isletas alargadas -unas "lenguas" que sobresalen unos dos metros y medio de la acera hacia la calzada- en las que supuestamente van a colocarse farolas, "pero por el momento sólo están los forjados y cuatro ladrillos mal puestos", asegura Fernando Valdés, que lleva diez años viviendo en Ciudad Naranco.
Faltan "remates"
Justo frente al centro social del barrio los vecinos también encuentran argumentos para certificar que las obras aún no se han acabado: un montón de vallas viales de plástico apiladas una sobre otra en medio de la calle. "No se puede decir que algo se ha terminado cuando los restos de la obra están tirados por las aceras. Lo que tienen que hacer es venir, rematar todo lo que les queda y llevarse lo que sobra", solicita Rubén Fernández. El presidente de la asociación Ciudad Naranco Existe afirma además que algunos pasos de cebra "están llenos de hormigón" y no están marcados como se debería.
Por otro lado, los vecinos exigen que el Ayuntamiento ponga en marcha la cinta mecánica que sirve para dar acceso a la entrada al ascensor de la calle Fernández de Oviedo, el elevador que se colocó para salvar el desnivel que existe entre los dos tramos de la calle. El tramo entre el cruce con Montes del Sueve y la puerta del ascensor está en cuesta y la cinta estaba pensada para ser utilizada por las personas con movilidad reducida o que se desplazan en silla de ruedas. "Se ha gastado mucho dinero en este ascensor y la cinta no funciona nunca. Lleva meses parada. Lo único que pedimos es que funcione, algo que es lógico", dice Fernández.
