El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Oviedo, Ignacio Fernández del Páramo (Somos), pretende negociar con el Arzobispado la construcción de un parque urbano para el casco antiguo en el solar del martillo de Santa Ana. En ese terreno, propiedad de la Iglesia y en un avanzado estado de abandono, el gobierno del exalcalde popular Agustín Iglesias Caunedo quiso levantar en su momento el museo de la ciudad. A juicio del edil de Somos, lograr que esos 641 metros cuadrados de terreno se pongan a disposición de la ciudadanía es la mejor solución hasta que el Arzobispado decida un uso definitivo para el solar.

Del Páramo hizo estas manifestaciones después de que el Servicio de Patrimonio del Principado haya iniciado un expediente sobre la situación actual y el futuro del martillo de Santa Ana, a partir de una denuncia de la Asociación Vecinal Oviedo Redondo en la que se emplaza a la administración autonómica a que "ejerza su función de vigilancia, protección y conservación, y ponga fin a las décadas de abandono de esta ruina en el corazón de Oviedo". Como primera medida, la Consejería de Cultura ha dirigido un escrito al Consistorio en el que le da cuenta de la denuncia vecinal y le solicita la remisión de un informe en el que se detalle la situación actual del martillo y las previsiones que se manejan respecto a su futuro.

El martillo de Santa Ana se ubica en la confluencia entre las calles Santa Ana y Canóniga, frente a la entrada del Museo de Bellas Artes de Asturias y muy cerca de la Catedral.

En su denuncia ante Patrimonio, "Oviedo Redondo" pone de manifiesto que, "además de suponer un espacio desaprovechado y un desperdicio urbanístico y social en un barrio carente de los mínimos equipamientos sociales y comunitarios, el estado de ruina y deterioro en que se halla el martillo de Santa Ana es difícilmente asumible por la ciudadanía ovetense". En la misma línea que Del Páramo, el colectivo también aboga por que el espacio se convierta en un parque, dado que, entre otras cosas, su situación es "óptima para permitir el disfrute y la perspectiva del palacio de Velarde, con su fachada monumental, que acoge las colecciones del Museo de Bellas Artes". No obstante, los vecinos se abren a negociar con el Ayuntamiento y con la propiedad "cualquier solución que sirviera para paliar esta situación de abandono".

Mientras llega y no llega una solución para el martillo de Santa Ana, aunque sea la provisional, el Consistorio insta al Arzobispado a retirar el andamio que está colocado en la fachada exterior y que lo coloque por dentro, para evitar el impacto visual negativo que ahora genera.

A lo largo de los años han sido muchos los proyectos que se han planteado para este espacio sin que ninguno de ellos lograra salir adelante. Así, siendo alcalde, Gabino de Lorenzo, planteó construir en él la sede de la Escuela Municipal de Música. Se iba a a iniciar la obra en 2008 con un presupuesto de más de dos millones de euros, pero finalmente quedó en nada.

También se sopesó la posibilidad de erigir en el martillo de Santa Ana un nuevo palacio episcopal o viviendas para sacerdotes, proyectos que, como el más reciente del museo de la ciudad ligado al Santo Sudario y a otras importantes reliquias, no cuajaron y se hallan en vía muerta.