Como si se tratase del conocido programa de televisión Crónicas Carnívoras, 27 personas venidas de toda España se acercaron anoche a un restaurante de Oviedo para llevar a cabo un reto no apto para todos los estómagos: devorar una hamburguesa con un kilo de carne y beber un litro de bebida (cerveza o refresco) en el menor tiempo posible.

El ganador consiguió acabarse el plato en 12 minutos 21 segundos, casi tres minutos más que el record alcanzado el año pasado. Piraña Bolt viajó desde Madrid y se llevó los 1.000 euros de premio y una plaza para la final nacional que se celebrará en la capital. "Soy de buen comer, no me preparé de una forma especial pero es recomendable venir en ayunas", explica. El madrileño es un habitual de los retos gastronómicos, aunque nunca se había enfrentado a una hamburguesa de este calibre.

El segundo premiado es un habitual de la cita, Omar Santirso, quien ya quedó segundo el año pasado.En esta edición paró el cronómetro en 14 minutos. "Fuí más rápido pero me costó acabar el plato", explica este ovetense afincado en Siero: "Uno de mis trucos es mojar el pan de la hamburguesa en cerveza para poder tragar mejor". Hay técnicas para todos los gustos...

Muy por detrás de él quedó Óliver Pérez, que empleó 25 minutos y 40 segundos. "Cuesta mucho acabar porque no es sólo la carne, la hamburguesa lleva muchas más cosas", asegura. Y es que entre los ingredientes de la hamburguesa estaban varios filetes de lomo, huevos y bacon.

El reto, organizado por la cadena "Billy Bob", era tan imposible para algunos que sólo cinco personas completaron la fartura. "Si vomitáis quedareis descalificados", recordaban los organizadores en medio de los sudores de algunos comensales.

El "muro de la fama" del local ovetense se decorará con las fotos de los que acabaron el reto. El ganador, "Piraña Bolt", se llevó mil euros y una plaza para la final nacional. Ya puede ir ayunando...