El Partido Popular acusa al concejal de Seguridad de "hacer la vista gorda" y de no cumplir con las ordenanzas municipales tras haber anunciado que el número de arrastres de la grúa municipal se ha rebajado en un sesenta por ciento con respecto a hace cuatro años. "Nos parece muy grave que se haya dado una instrucción para que se haga la vista gorda respecto a las sanciones. Una cosa es no usar el servicio de grúa con un fin recaudatorio, que era el objetivo que buscó el PP con la puesta en marcha de la conocida como grúa a demanda, y otra es no cumplir las ordenanzas municipales que regulan los estacionamientos en la ciudad", denuncia Gerardo Antuña.

El concejal responsable del área, el socialista Ricardo Fernández, asegura que el Ayuntamiento está cumpliendo con la normativa y que "en ningún momento se mira para otro lado" en cuanto a sanciones derivadas de la grúa, "lo que pasa es que sólo se sanciona a un vehículo cuando realmente molesta o entorpece el paso a los demás".