La celebración del fin del Ramadán sorprendió ayer a los vecinos de la Florida. La sorpresa tuvo que ver con los tiempos madrugadores de la comunidad musulmana, que empezó a llamar a la oración a través de un sistema de megafonía desde las siete y media de la mañana. Aunque los musulmanes residentes en Oviedo llevan años celebrando el fin del Ramadán en la ciudad, en esta ocasión no pudieron hacerlo en el polideportivo de Vallobín, como hacían en años anteriores, por coincidir con otra actividad. De esta forma, el fin del Ramadán se celebró en las pistas cubiertas de la Florida, donde los vecinos no estaban acostumbrados a presenciar esta celebración religiosa, y tampoco a escuchar la llamada a la oración a esas horas.