El juicio celebrado esta mañana en el Juzgado de lo Penal nº4 de Oviedo en el que se juzgaba a una madre ovetense por maltratar a su hijo de 12 años en reiteradas ocasiones, ha quedado visto para sentencia. La Fiscalía la acusa de haber reaccionado de forma violenta contra su hijo en varias ocasiones. La primera en las Navidades de 2015 cuando consideró que su hijo, de 10 años en aquel entonces, no hacía lo que ella quería y por ello comenzó a propinarle patadas una vez el menor se había caído al suelo. Ya en el verano de 2016, cuando el menor no se quería poner el pijama para ir a la cama, la madre siguió a su hijo hasta su habitación y le agarró fuertemente del cuello. Fue el padre de la víctima y marido de la condenada quien actuó en defensa del menor, alertado por los gritos del niño. En otra ocasión, durante el curso escolar 2016-2017, cuando el niño y su madre volvían hacía su casa esta le propinó un golpe que le hizo sangrar por la nariz y la boca.

En un primer momento la fiscalía había pedido 24 meses de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena, privación del derecho a la tenencia y porte de armas por 6 años y la prohibición de aproximarse al niño, a su domicilio, centro de estudios o cualquier otro frecuentado por el mismo, a menos de 300 metros y de comunicarse con el por cualquier por medio, todo durante 6 años, junto con el abono de las costas procesales.

Finalmente, la Fiscalía modificia su petición y pide para la acusada 31 días en beneficio de la comunidad, la privación de tenencia y porte de armas durante un periodo de un año y un día y a 6 meses de alejamiento y privación de comunicación con el menor por cada uno de los dos delitos que se le imputan.

La abogada de la defensa no acepta los cargos que pesan sobre la acusada y pide la libre absolución de la madre ovetense.