El juicio celebrado ayer en el Juzgado de lo Penal nº 4 de Oviedo en el que se juzgaba a una madre ovetense por maltratar a su hijo de 12 años en reiteradas ocasiones, ha quedado visto para sentencia. La Fiscalía la acusa de haber reaccionado de forma violenta contra su hijo en varias ocasiones. La primera fue en las Navidades de 2015 cuando consideró que su hijo, de 10 años en aquel entonces, no hacía lo que ella quería y por ello comenzó a propinarle patadas caído en el suelo. La Fiscalía ha rebajado la pena que pedía en un principio, a 31 días de servicio a la comunidad y 6 meses de alejamiento de su hijo.

En un primer momento, la Fiscalía había pedido 24 meses de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena, privación del derecho a la tenencia y porte de armas por 6 años y la prohibición de aproximarse al niño, a su domicilio, centro de estudios o cualquier otro frecuentado por el mismo, a menos de 300 metros y de comunicarse con el por cualquier por medio, todo durante 6 años, junto con el abono de las costas procesales. Finalmente, solicita 31 días de servicio en beneficio de la comunidad, la privación de tenencia y porte de armas durante un periodo de un año y un día y a 6 meses de alejamiento y privación de comunicación con el menor por cada uno de los dos delitos que se le imputan.

Ya en el verano de 2016, cuando el menor no se quería poner el pijama para ir a la cama, la madre le agarró fuertemente del cuello. Fue el padre de la víctima y marido de la condenada quien actuó en defensa del menor, alertado por los gritos del niño. En otra ocasión, le propinó un golpe que le hizo sangrar por la nariz y la boca.

La abogada de la defensa no acepta los cargos que pesan sobre la acusada y pide la libre absolución de la madre ovetense.