El excomisario de la Policía Local, Agustín de Luis, disfruta de su libertad condicional en Madrid. Desde allí lee las informaciones sobre la macrooperación contra el amaño de contratos que afecta a decenas de municipios, entre los que se encuentra Oviedo, el que fuera su destino profesional durante más de veinte años. La entrevista publicada ayer por LA NUEVA ESPAÑA al actual jefe de la Policía Local, José Manuel López, llamó especialmente su atención. En ella, López dice que entre 2010 y 2011, "debieron comprarse aplicaciones de Gespol para las agendas electrónicas de la Policía, pero es fue cuando estaba de jefe Agustín de Luis". Así, el excomisario aludido asegura: "Yo no estaba al frente de la Policía Local en el periodo investigado en la 'operación Enredadera'" y niega tener cualquier relación con las empresas que están bajo la lupa de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Judicial (UDEF). Además, se reserva el derecho a ejercer acciones legales contra aquellos que atenten contra su honor.
De Luis fue condenado a cumplir quince meses de prisión por ocultar el atestado de un atropello ocurrido el 19 de enero de 2012 con un resultado positivo en alcoholemia. El excomisario de Oviedo se jubiló ese año y le sucedió José Manuel López, que declaró el martes en la comisaría de la Jefatura Superior de Policía en calidad de investigado en la "operación Enredadera".
