Lo que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Judicial buscaba el pasado martes en Oviedo en una investigación que acabó con sendas declaraciones en comisaría del Jefe de la Local, José Manuel López, y el subinspector Fernando Corzo, eran vínculos de un total de doce empresas con el Ayuntamiento de Oviedo. No sólo contratos. La investigación en el Ayuntamiento dentro de la operación "Enredadera" buscaba adjudicaciones en concursos pero también cualquier presencia de las firmas investigadas dentro de licitaciones o contratos menores.

De momento ha trascendido que entre la documentación incautada por los policías estaba la adjudicación de una pistola cinemómetro (un radar portátil) con expediente abierto en 2014 y adjudicación en 2015. Pero también el software de las tablets que utilizan los policías locales y que se contrató hace ocho años, en 2010. En teoría, en esta época estaba al frente el anterior comisario jefe, Agustín de Luis, como reiteró el martes el actual jefe, José Manuel López. No obstante, De Luis negó ayer a este periódico cualquier relación con estos contratos.

De cualquier manera, parece que la adquisición a Aplicaciones Gespol, una de las firmas en las que se ha puesto más el foco dentro de la operación "Enredadera", del software para los dispositivos portátiles de la Policía local, obligó a realizar varias actualizaciones posteriores de software. De esta manera, y según diversas fuentes, la UDEF también habría detectado pagos de hace sólo tres años, entre 2014 y 2015, a esta empresa por este concepto.

Cuando el martes los agentes de la UDEF se presentaron en el Ayuntamiento, lo hicieron con una resolución de un juzgado de Badalona por el que los funcionarios tenían que ofrecerles cualquier información relacionada con alguna de las doce empresas durante un periodo de tiempo muy concreto: entre 2010 y la actualidad.

Aunque no han trascendido todos los papeles que la UDEF haya podido llevarse para analizarlos y solicitar, quizá, nueva documentación o realizar nuevos interrogatorios a la luz de lo descubierto allí, sí se sabe que algunas de las empresas que figuran en la lista y de la que se pidió documentación no llegaron a tener contratos en firme, pero sí estuvieron en los concursos. Es el caso, por ejemplo, de Valoriza, una empresa muy grande que en su día estuvo peleando para conseguir el contrato de la zona azul en la época de Agustín Iglesias Caunedo en la Alcaldía.

El listado completo de las empresas investigadas incluye a Aplicaciones Gespol, Bilbomática, Valoriza Servicios Medioambientales, Grupo Agema Ingeniería y Servicios, Utebo Servicios de Gestión, Arco Capital Fund, Anento Servicios de Gestión, Enaltar, Arcor, Aralia Servicios Sociosanitarios, Vehículos Equipamientos y Carrocerías Prieto Puga y, por último, Integración de Servicios Administrativos.

Controles de todo tipo

El foco de las operaciones llevadas a cabo en Oviedo dentro de la operación "Enredadera" sólo tenía dos objetivos: el comisario López y el subinspector Corzo. Los agentes dejaron claro que no venían a buscar ninguna otra cosa. Después, durante su declaración, al jefe de la Policía local le preguntaron por empresas y por nombres propios de algunos de los investigados. López no negó que conocía a algunas de aquellas personas. El comsiario argumentó en su declaración que su trabajo incluye conocer qué tipo de materiales ofrecen las empresas que trabajan en el ámbito de la Seguridad, pero insistió en que los contratos se hacían "con controles de todo tipo", con asesoramiento externos de la Universidad y sin capacidad, por su parte para influir en estos procesos.