Entre el silencio expectante a la derecha y la petición de cuentas de la izquierda, el presidente del Principado escogió ayer la vía intermedia del "vamos a respetar a la justicia". Javier Fernández entiende las revelaciones que conectan con Asturias el caso "Enredadera" como "un asunto de la justicia que debe aclarar la justicia" y sobre el que "cada ayuntamiento es muy libre de actuar como considere oportuno en orden a aclarar las cuestiones políticas que se puedan derivar".

Ayer, sólo Podemos, y con menos vehemencia IU, fueron más allá en la demanda de explicaciones a los políticos asturianos mentados en las escuchas de la trama. PP y Ciudadanos declinaron hacer comentarios y el presidente de Foro Asturias, Pedro Leal, prefirió "no entrar en detalles de estas cuestiones que se han ido publicando" después de asegurar que no le parece "adecuado que se introduzcan alusiones a terceras personas en intervenciones de un sumario y que se reflejen como información conversaciones o referencias que nada tienen que ver con lo que se está instruyendo".

La coportavoz de la Secretaría General de Podemos Asturias, Nuria Rodríguez, emplazó al exvicepresidente del Gobierno y expresidente del Principado Francisco Álvarez-Cascos a "dar cuenta y explicaciones de cualquier posible contacto con personas vinculadas a esta trama". Lo hizo sin llegar a pedir la comparecencia parlamentaria en la Junta que "valora" respecto al exconsejero socialista Jaime Rabanal, pero reiterando su petición de que "se esclarezca cualquier responsabilidad política que pueda derivarse de las investigaciones". Se dicen en la formación morada "profundamente preocupados por las ramificaciones del caso" y lamentan la constatación de "la extensión de las redes clientelares en los municipios, fruto de la falta de voluntad para luchar contra la corrupción". Celebran, mientras tanto, que su marca electoral en la capital, Somos Oviedo, haya conseguido que el Ayuntamiento se persone en la causa".

El diputado de IU Ovidio Zapico, hizo votos por una "radical apertura e investigación", por la "inflexibilidad" y la "transparencia", pero precisando la necesidad de "delimitar muy bien lo que se está investigando, cuáles son los hechos relevantes y aclararlos al máximo". A su juicio, "caer en una acusación general puede llegar a beneficiar a los posibles responsables". Con respecto a las llamadas a comparecer con las que amaga Podemos, les parece "bien todo lo que sea útil" y descartable todo aquello que "no sea útil aunque pueda parecer muy mediático".