Compañías, actores, directores y dramaturgos reclaman un responsable artístico del Campoamor que se encargue de elaborar la programación anual, diseñar coproducciones con otros teatros y exportar montajes propios. Una figura similar a los directores del Teatro Real, el Español, el Arriaga o el Old Vick. Es decir, teatros de prestigio ubicados en capitales de provincia y que rondan las 1.500 localidades de aforo. La demanda forma parte de la denuncia que hacen los artistas asturianos sobre la falta de actividades culturales en Oviedo y la carencia de grandes espacios que puedan albergar eventos multitudinarios, publicada ayer por LA NUEVA ESPAÑA.
El director de escena ovetense Emilio Sagi (antiguo responsable artístico del teatro de la Zarzuela y el Teatro Real en Madrid, y del Arriaga en Bilbao) asegura que "es necesario que un director marque la línea artística del Campoamor e incluso del Filarmónica para hacer ciclos anuales coherentes y estables". Cree que, "sin perjudicar a la Ópera", la ciudad debe contratar a un profesional "que programe con criterio".
El director de Teatro del Norte, Etelvino Vázquez, suscribe la opinión su colega Sagi, pero incide en el hecho de que la Ópera y la Zarzuela tengan directores artísticos. "Es incongruente. No tiene sentido que la Ópera y la Zarzuela estén capitaneadas y que el ciclo del año, no. Lo que pasa en el Campoamor es extraño. Lo que se programa no puede depender de la política. Sería aconsejable que hubiese un organismo con autonomía por periodos anuales y un director artístico que tuviese cerradas y publicitadas todas las actividades a 1 de septiembre".
El teatro Jovellanos de Gijón (1.123 butacas) y el Palacio Valdés de Avilés (747 localidades) no tienen un director artístico, pero cuentan con técnicos especializados que se dedican a programar toda la temporada. El caso de la capital asturiana es similar, aunque con matices. La Fundación Municipal de Cultura asume esa labor. Los funcionarios se hacen cargo de la agenda y a veces reciben asesoramiento externo para programar ciclos concretos diseminados a lo largo de los meses, pero cambian las fechas de un año a otro. No pasa lo mismo con la temporada de Ópera y Zarzuela. Ambas están bajo el mando de directores artísticos y el 90% de sus espectáculos se hacen en el Campoamor.
"Innecesario", dice el edil
El concejal de Cultura ve innecesario el nombramiento de un director en el Campoamor y defiende la existencia de mayor variedad y calidad de espectáculos, aparte de la Ópera, desde la llegada del tripartito al gobierno local: "El Campoamor no necesita más puestos burocráticos o directivos. Ha pegado un cambio al introducir en los últimos años más teatro y actuaciones musicales, e incluso al usar el Salón de Té como un espacio para veladas literarias".
Según Alfonso Aguirre, actor y miembro del núcleo duro de la compañía Teatro Margen, la carencia de director artístico en el Campoamor es insólita dentro y fuera de las fronteras españolas. "Todos los grandes teatros de España y Europa tienen un responsable, Oviedo es un caso aislado". De la misma opinión es el actor y director de EscenAstuirias, Luis Alija, para quien es indudable que un responsable "aportaría calidad y profesionalidad al teatro" y quizás apostaría más por los profesionales asturianos, "que falta hace".
