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Santo Domingo

Los vecinos aplauden la obra de la Ronda Sur, pero piden extenderla a San Lázaro

Los residentes, que echan en falta más bancos y aparcamiento, destacan el nuevo paso de peatones habilitado entre Santo Domingo y Fozaneldi

El minicarril-bici del Campo de los Patos recién pintado. LUISMA MURIAS

Los vecinos de los barrios de Fozaneldi y Santo Domingo celebran el resultado de las obras para crear un pequeño bulevar entre la glorieta del Cardenal Tarancón y el Campo de los Patos, culminadas ayer tras cuatro meses de trabajos. Los residentes destacan la mejora estética de la zona y la creación de un nuevo paso de peatones para conectar Santo Domingo con el colegio de Fozaneldi, pero reclaman la colocación de bancos, habilitar un aparcamiento y extender las mejoras a toda la circunvalación.

Los trabajos acometidos durante los últimos cuatro meses con un coste de 623.000 euros permitieron dotar a casi 400 metros de calle de aceras con un ancho de 2,5 metros, una mediana ajardinada y con árboles y establecer nuevos puntos de luz para mejorar el pase de peatones por las noches. Además, el proyecto incluyó la urbanización de la calle Goya y su conversión en vía de sentido único para ganar plazas de aparcamiento.

Vecinos preguntados por LA NUEVA ESPAÑA coinciden en valorar positivamente los cambios realizados en la zona, pero sugieren alguna mejora. "Ahora que tenemos aceras anchas es el momento de colocar más bancos", solicita la vecina de la calle Postigo, María Luisa Ferreira, muy satisfecha con el nuevo paso de cebra habilitado en las proximidades del colegio de Fozaneldi. "Conozco muchas familias a las que le viene de lujo porque cruzar aquí es un alto riesgo", añade la mujer, acompañada en su paseo matinal por los nuevos viales por su perro "Coco".

El buen resultado de los trabajos es visto por los vecinos como una muestra de la necesidad de apostar por este tipo de cambios en toda la circunvalación. "La mejoría es clara, pero hay que extenderla a los barrios de San Lázaro y Otero para que no haya ciudadanos de primera y de segunda", explica José Luis González, partidario de habilitar "cuanto antes" un nuevo paso de peatones que conecte el Hotel Santo Domingo con Otero y Villafría. "Los jardines y los árboles están bien, pero lo primordial es la seguridad", subraya, deseoso de que el Ayuntamiento lleve a cabo cuanto antes nuevas fases para dotar el resto de la circunvalación de nuevos pasos de cebra y semáforos que den protagonismo a los peatones frente a los vehículos que cada día circulan por la vía.

Hay también quien valora los esfuerzos por crear plazas de aparcamiento con la eliminación de uno de los dos carriles de la calle Goya, pero considera la medida todavía insuficiente. "Estaría bien buscar un sitio para hacer un aparcamiento porque venir aquí en coche es una odisea", considera Ángeles Parejo, vecina de Ventanielles, pero empleada en la zona. "Ojalá nos dejaran alguna de las farolas nuevas para el palacio de los Deportes", comenta con humor sobre la colocación de numerosas farolas en comparación con el déficit existente en otros puntos de la ciudad.

Mejoras ansiadas

Si bien los trabajos todavía estaban ayer pendientes de los últimos detalles y tanto el nuevo paso de peatones como algunas partes de la calle Goya permanecían valladas, los propios operarios encargados de los trabajos admitían el ansía de los vecinos por utilizar los nuevos espacios públicos habilitados. "Cada día nos encontramos las vallas movidas y vemos gente utilizando ya el nuevo paso de peatones", admitía uno de los operarios tras ver como un paseante cruzaba por el paso de cebra cuyo semáforo permanecía aún desactivado, a la espera de entrar en servicio.

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