La defensa de José Luis Díaz Ramos -el ovetense que se encuentra en prisión preventiva como principal sospechoso del "crimen de Salesas"- ha solicitado en la Audiencia Provincial que la primera declaración de su cliente sea eliminada del proceso y no pueda ser utilizada durante el juicio. La visa está pendiente de celebrarse, con el fin de esclarecer los detalles de la trágica muerte de José Manuel Fernández Vázquez, el hombre que apareció cosido a puñaladas en junio del año pasado en el cuarto de basuras del número 8 de la plaza Primo de Rivera.

La declaración que la defensa quiere anular se produjo sólo dos días después de que el cuerpo de "Lolín" -así era conocida la víctima en su círculo cercano- apareciese sin vida en el edificio situado en el entorno del conocido centro comercial. Ese día, Díaz Ramos no fue detenido, pero incurrió "en una serie de contradicciones" a la hora de explicar sus movimientos el día del crimen, uno de los motivos que llevaron a la Policía a estrechar el cerco sobre él. Su abogado defiende que ese día su cliente ya tenía la condición de investigado, por lo que le habría correspondido la asistencia de un letrado que no tuvo.

La intención de la defensa, ejercida por Luis Tuero, pasan por evitar que las personas queformen parte del jurado popular durante la vista tengan acceso a esas declaraciones, que a su vez son importantes para la acusación particular. No en vano, la abogada de la familia del fallecido, Patricia Baizán, podría apoyarse en esos testimonios como uno de los argumentos para relacionar al sospechoso con la escena del crimen.

La Audiencia Provincial ha convocado a las partes para la próxima semana, momento en el decidirá sobre las peticiones de Luis Tuero. El propio sospechoso envió en su día una carta a LA NUEVA ESPAÑA en la que aseguraba no ser el asesino. "Me veo involucrado en esta historia siendo inocente", recoge la misiva.