Asturias sigue de celebración del triple centenario y lo hace fuera de sus fronteras pero con las mismas señas de identidad, gastronomía, música y cultura. Fabada, gaita y la histórica Universidad de Oviedo protagonizaron ayer las celebraciones del Día de Asturias en el Centro Asturiano de Barcelona. Más de un centenar de personas se reunieron en las instalaciones de Sarriá para celebrar sus orígenes. La música la puso Vicente Prado, "el Pravianu", en representación de la Real Banda de Gaitas "Ciudad de Oviedo", que ha sido galardonada con la medalla de oro de los asturianos en Barcelona, y Carlos Velasco, finalista del Concurso y Muestra de Folklore "Ciudad de Oviedo" que organiza LA NUEVA ESPAÑA.

Adolfo García Blanco era ayer un hombre feliz, lleva esto de la asturianía en la sangre y tener que viajar a Barcelona para recibir el cariño de los asturianos en la capital catalana le hacía especial ilusión. El presidente de la Real Banda de Gaitas "Ciudad de Oviedo" lleva un año "que no puede ser mejor", con un reconocimiento como el de ayer, al que se suma la medalla de plata del Ayuntamiento de Oviedo. No sólo fue la insignia, fueron los abrazos, los apretones de manos y las palabras que le dedicaban los que se cruzaban con él durante la jornada de ayer. Lo resumió el Pravianu: "Debe de ser que en la Banda de Oviedo estamos haciendo las cosas más o menos bien". Habría que quitar el "más o menos" a juzgar por los aplausos recibidos por los dos. El gaitero se atrevió hasta con el himno catalán y acompañó la impresionante voz de Velasco.

Una jornada de convivencia y de defensa de la cultura asturiana a través de una banda de gaitas, la de Oviedo, que es considerada en Barcelona como "un ejemplo de dinamización social a través de la música", en palabras del presidente del Centro Asturiano, Enrique Delgado. El concejal de Cultura de Oviedo, Roberto Sánchez Ramos, no pudo estar presente pero envió un discurso de agradecimiento.