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Detectan hasta diez irregularidades en la empresa que gestiona los semáforos

Aluvisa, presente en las escuchas de "Enredadera", no cumple con el número de trabajadores, la maquinaria, el software ni la instalación de radares

Operarios de Aluvisa, trabajando ayer en Oviedo. LNE

Alumbrados Viarios SA, Aluvisa, la empresa que en Oviedo se encarga del mantenimiento de la red semafórica desde hace casi dos años, se podría enfrentar a multas que van de los 1.200 euros a los 30.000 e incluso a perder la licitación en la ciudad. El motivo son las muchas irregularidades (hasta diez) detectadas por el nuevo responsable del contrato. Según se hace constar en un informe elaborado a finales del mes pasado, Aluvisa incumple la mayoría de obligaciones de su contrato. Ni tiene asignado el personal que se le requiere, ni dispone de los vehículos especiales a los que se ha comprometido, los programas informáticos de gestión que había planteado, ni siquiera ha logrado realizar la rotación de radares y fotorrojos a los que le obliga el contrato. Todos los incumplimientos, calcula en el informe, suponen para las arcas públicas un agujero de más de 400.000 euros al año.

El informe es demoledor, y aunque de él no se desprenden directamente sanciones, el trabajador municipal encargado de redactarlo deja claro que de los incumplimientos se derivan dos infracciones leves, tres graves y dos muy graves, que llevan acompañadas, respectivamente, hasta 1.200 euros de multa, entre 1.201 y 12.000 euros y entre 12.001 y 30.000 euros amén de la posible resolución del contrato.

"Enredadera", en el origen

Aunque los incumplimientos de Aluvisa se podrían haber producido en cualquiera de los casos, el demoledor informe del responsable municipal se deriva, en cierta forma, del "caso Enredadera" de amaños en contratos de tráfico en las administraciones que estalló en verano. Y doblemente. Por una parte, porque a la destitución del comisario José Manuel López como jefe de la Policía Local siguió una revisión de los contratos que gestionaba el área y el nombramiento de nuevos responsables, como ha sido el caso de la red semafórica. De hecho, el nuevo encargado de fiscalizar la labor de Aluvisa es nombrado el 17 de agosto y se le notifica cinco días más tarde. El 5 de septiembre recibe una serie de documentación que había solicitado a la empresa y a partir de ahí elabora el informe en el que se detectan los siete supuestos de infracciones.

La otra pata que liga este caso con "Enredadera" es que fue precisamente Aluvisa y la consecución de este contrato de la red semafórica un asunto muy presente en las escuchas a los investigados en este caso. El empresario astorgano Ángel Luis García Martín "El Patatero" pretendía hacerse con esta licitación, y al ver que Aluvisa había logrado la adjudicación, protesta en conversaciones con otros socios culpando al exjefe de Policía, José Manuel López, de no haber actuado en su favor. Es cuando dice la famosa frase "muerde la mano que le da de comer", de la que luego el empresario se ha retractado en declaraciones ante el juez, explicando que no tenía nada que ver con pagos al comisario ni con ningún otro tipo de favores o prebendas.

A pesar del enfado de "El Patatero", que en ese momento y en conversaciones con terceros amenazó con ir a hablar con el Alcalde y los concejales y acudir, incluso, a los tribunales, Aluvisa se hizo finalmente con la red semafórica de Oviedo. Pero con poca diligencia según se desprende del informe realizado ahora.

Los incumplimientos

El responsable considera que son infracciones muy graves estar prestando un servicio que supone "un enriquecimiento injusto" por prácticas defraudadoras. También, el no mantenimiento del sistema. Entre las graves, detalla la falta de un vehículo grúa, la de un técnico de los siete previstos y las diversas omisiones en los servicios ofertados. También se aprecian dos infracciones leves, la no presentación en soporte informático del parte diario de reparaciones y la no prestación de diversos servicios que constituyen una negligencia leve.

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