Emilio Alperi estaría más que satisfecho con el resultado de su trabajo. Adrián Morán, jugador de la peña Villa de Noreña que Alperi fundó en 1999 y dirigió hasta su fallecimiento en febrero del año pasado, se alzó con el título infantil en en el torneo de promesas desarrollado durante las últimas semanas en la bolera municipal de la Villa Condal para recordar la figura del "padre" de los bolos noreñenses.
Adrián, la última perla de la mina de campeones de Noreña -aunque formado inicialmente en El Berrón- volvió a dar una muestra de su estado de gracia y prolongó la racha de más de un año sin perder un cara a cara. Morán venció en la final de su categoría a Omar Gómez, de la peña El Berrón, por un ajustado 12 a 10 que le permite agrandar su leyenda como uno de los mejores jugadores de categorías inferiores que se recuerda.
En categoría juvenil la victoria fue también para el de siempre. Pablo Fernández, gran dominador de la categoría en los últimos años y vigente campeón de Asturias de Segunda Categoría absoluta pese a sus 17 años, no encontró rival en José Miguel Fernández, de la peña El Berrón, al cual superó por un contundente 12 a 4, reflejando el luminoso la clara diferencia entre ambos contendientes.
Tras las partidas tuvo lugar una emotiva entrega de premios. A la misma no faltaron los familiares del homenajeado. Tanto la viuda, Conchita Álvarez, como una de sus hijas, quienes, junto al presidente de la Federación Asturiana de Bolos, Amable Poladura; la edil noreñense Beatriz Corzo y el presidente de la peña Villa de Noreña, José Manuel González, se encargaron de repartir los premios entre los aplausos de los presentes.
La celebración del campeonato supone un reconocimiento más a Emilio Alperi, quién desde su fallecimiento no para de recibir homenajes. Tras su muerte, el Ayuntamiento de Noreña tramitó el cambio de denominación de la bolera municipal a petición de varios colectivos del municipio, pasando ésta a llevar desde entonces el nombre de Emilio Alperi Fombona.
Igualmente, el año pasado se disputó la primera edición del campeonato de categorías inferiores y con esta segunda edición la entidad busca consolidar una cita orientada al fomento de la práctica del deporte autóctono entre los más jóvenes. La decisión de organizar una competición de promesas se tomó debido a la dedicación total durante dos décadas del dirigente deportivo a tratar de repoblar las boleras de cuatreada.
Además de entrenar a las decenas de jugadores que a lo largo de los últimos 20 años se consolidaron en la cantera noreñense, Alperi fue monitor de bolos en numerosos colegios de toda Asturias e incluso cruzó el charco para enseñar el deporte autóctono a los jóvenes de los centros asturianos de Argentina y el colegio Covadonga de Santa Fe del mismo país sudamericano en el que hizo grandes amigos.
José Manuel González Camblor trata ahora de tomar el testigo y la mejor manera de mantener elevado el listón dejado por su antecesor es promover torneos como el que acaba de terminar. Actualmente, la peña Villa de Noreña mantiene una de las canteras más exitosas de la región junto con El Berrón y la peña Batán de Mieres. El próximo objetivo de los jóvenes jugadores es levantar el trofeo de campeón del Memorial Ángel Prado que acoge la bolera ovetense de Pumarín.
