La capilla del tanatorio de Los Arenales se llenó esta tarde con un centenar de amigos y compañeros de partido deseosos de dar su último adiós a Manuel Palmero. El funeral del que fuera concejal del PP en el Ayuntamiento de Oviedo, entre 1991 y 2003, congregó a numerosos ediles de la actualidad y de corporaciones anteriores que compartían la misma idea: "se fue un hombre bueno y trabajador".

Palmero falleció el pasado día 15 de este mes, a los 65 años, en Murcia, donde residía desde hacía tres años. Allí fue incinerado, pero la familia consideró conveniente realizar un acto de despedida en la ciudad que tanto quería. "Siempre estaba pensando en Oviedo a pesar de la distancia", declaró emocionada la viuda, María Inmaculada Cosmen, tras la celebración religiosa que muchos aprovecharon para darle el pésame.

Entre los asistentes no faltaron representantes del grupo municipal del PP con el exalcalde y portavoz Agustín Iglesias Caunedo a la cabeza. "Era un militante histórico y un compañero clave en el primer gobierno municipal de nuestro partido", explicó Caunedo al finalizar un funeral al que asistió acompañado por los concejales Gerardo Antuña, Covadonga Díaz y José Ramón Pando.