Los trabajos acometidos por 123 operarios del plan de empleo municipal para recuperar el bosque de La Zoreda están haciendo aflorar vestigios arquitectónicos hasta ahora desconocidos. Desde que hace unos días comenzasen las labores que se prolongarán hasta el próximo verano los empleados han descubierto bajo un manto de toneladas de vegetación acumuladas tras años de abandono una casona asturiana del siglo XVIII y dos talleres de la antigua fábrica de explosivos construidos de inicios del siglo XX de los que no existía catalogación.

El avance de los trabajos para recuperar 300.000 metros cuadrados de zona verde y habilitar seis kilómetros de sendas para realizar rutas a pie y en bici no deja de sorprender a un equipo contratado para la causa con un presupuesto de 3,88 millones de euros que incluye profesionales cualificados como biólogos o un arqueólogo.

Tanto la casona como los talleres se encontraban sepultados por grandes cantidades de restos vegetales. Todo apunta a que la vivienda construida hace alrededor de siglo y medio alojaba a los antiguos propietarios de los terrenos que a finales del siglo XIX sirvieron para levantar la fábrica explosivos y tras el cierre de esta fueron adquiridos por el Ayuntamiento de Oviedo.

Uno de los talleres descubiertos destaca por su diseño basado en la arquitectura racionalista propia del periodo de entreguerras (años 20 o 30 del siglo XX), lo lleva a los expertos a pensar que fueron construidos en dicha época. La construcción cuenta con un acceso subterráneo y una cristalera que le diferencian del resto de edificaciones industriales heredadas de la antigua industria de explosivos.

Lo más llamativo de los hallazgos es que hasta ahora no constaba documentación alguna sobre su existencia. "No hay rastro de ninguno de ellos en la catalogación realizada en la zona en el año 1999", coinciden en señalar los responsables del plan de empleo sobre la importancia de los hallazgos.

Los descubrimientos son el fruto de las eficaces labores llevadas a cabo en los últimos días por los trabajadores. El avance de los desbroces y la recogida de ramas, hojas y troncos ha dejado a la vista también varios ejemplares de haya con una circunferencia de más de tres metros. "Se está dando valor a un espacio para el ocio que cuenta con una gran flora, fauna y árboles centenarios", subrayó el edil de Economía y Empleo, Rubén Rosón, que indicó que la superficie recuperada para el disfrute de los ovetenses "es mayor que la del Parque de Invierno".

Por su parte, la vicealcaldesa Ana Taboada anunció que ya está encargado un proyecto para desarrollar un campo multiaventura que se desarrollaría el próximo mandato. "Queremos crear un espacio interesante tanto por su patrimonio como por las actividades al aire libre", indicó Taboada.