El Alcalde de Oviedo, el socialista Wenceslaó López, lamentó ayer "no poder exigir responsabilidades" por la apertura del Auditorio Príncipe Felipe en 1999 "incumpliendo la ley" e instó al PP a pedir disculpas por poner en marcha un equipamiento con unas deficiencias cuyo coste de reparación es de 2 millones de euros".

El regidor salió al paso de las declaraciones del edil popular José Ramón Pando, en las que criticó las demoras del tripartito a la hora de acometer las obras necesarias para corregir las deficiencias en materia de seguridad existentes en el edificio y que hace un año llevaron al Consistorio a tomar varias medidas correctoras temporales como el cierre parcial del aforo para determinados eventos. "Se me revuelve alguna parte del cuerpo al ver cómo el responsable de los incumplimientos nos critica por no arreglar su desaguisado", declaró López, invitando a los populares a "callarse y dejar trabajar".

El máximo representante municipal atribuyó las demoras en la elaboración del proyecto definitivo para corregir las deficiencias a las dificultades encontradas por los expertos. "Yo no soy ingeniero ni arquitecto, pero los técnicos tuvieron dificultades para evaluar los problemas existentes", declaró el edil socialista.

Informes incompletos

López hizo referencia a los diferentes informes elaborados hasta ahora y a las grandes diferencias tanto técnicas como económicas existentes entre los mismos. "Unos informes se corrigen a otros y aprecian que hay aspectos incompletos", señaló para tratar de explicar el incremento desde los 850.000 euros de costes calculados en un primer informe hasta los dos millones del proyecto definitivo que todavía está siendo revisado.

El Alcalde se comprometió a ejecutar las obras una vez tenga en su mano el texto definitivo. "Desde el momento que fuimos conscientes de los problemas hemos seguido los trámites correspondientes para tratar de subsanarlo", resumió López.