Una mujer de 38 años denuncia una espera de casi dos años para que un tribunal médico la examine y dictamine su grado de minusvalía. Un raro trastorno genético afecta a su sistema endocrino y coronario y le produce artrosis lumbar. Lleva un año de baja como administrativa, justo el tiempo en que las dolencias comenzaron a mermar notablemente su salud. Tres meses antes -el 27 de septiembre de 2017- solicitó por consejo de su médico de cabecera una cita en el Centro de Valoración de Discapacidad de Oviedo, dependiente de la Consejería de Bienestar Social y con base en la plaza de América. Allí le dijeron que no la podrían ver hasta doce meses después. Es decir, en septiembre de este año. Sin embargo, pasó la fecha sin que le llegase citación alguna. Al preguntar de nuevo, le informaron que el plazo medio de espera se había alargado a 18 meses y añadieron que, "siendo optimistas, la atenderían en marzo de 2019.
"Es excesivo y vergonzoso. Parecen no darse cuenta del perjuicio que me están ocasionado a mí y al resto de personas que esperan su baremación. El reconocimiento de un grado de discapacidad es un derecho que da lugar a una serie de beneficios en compensación por todo lo que nos perdemos", explica la afectada, que prefiere no revelar su nombre hasta resolver su situación. Ahora teme perder su puesto de trabajo después de un año de baja y cree que si ya tuviese una resolución positiva sobre su discapacidad, tendría un acceso más fácil a otro empleo. Su indignación la ha llevado a interponer dos quejas seguidas ante Bienestar Social. Asegura que obtuvo la sentencia de los trabajadores en la propia ventanilla: "Me dijeron que lo único que hago allí es generarles papeleo a ellos y que mi denuncia no va a llegar a donde tiene que llegar. Que mejor lo intento en un medio de comunicación".
Demoras en Asturias
LA NUEVA ESPAÑA se ha puesto en contacto con la Consejería de Bienestar Social del Principado para conocer las causas de la demora en la atención del Centro de Valoración de Discapacidad de Oviedo. No habrá respuesta hasta después del puente festivo de la Constitución.
En Asturias hay tres Centros de Valoración de Discapacidad ubicados en Oviedo, Gijón y Avilés, y todos acumulan retrasos. Especialmente en la Villa del Adelantado, donde los interesados esperan una media de veinte meses en un área sanitaria que engloba de Cudillero a Gozón y un número de 150.000 potenciales pacientes. Los centros de Oviedo y Gijón atienden a unas 450.000 personas cada uno y ambos cuentan con tres equipos de profesionales reforzados con un trabajador social en el caso de Oviedo. La lista de espera acumulada es de 432 personas en la capital asturiana, 215 en Gijón y 317 en Avilés. Además, el tiempo de espera puede alargarse aún más si el paciente necesita se valorado tanto por un médico como por un trabajador social.
El cuadro clínico
La mujer que ha denunciado la excesiva demora en la atención del Centro de Valoración de Discapacidad de Oviedo sobrellevó sus dolencias hasta que no pudo más: "Es una enfermedad genética que también sufre mi hermana con otro tipo de sintomatología. A ella le afecta a los huesos. A los cincuenta años se tuvo que poner una prótesis de cadera y ahora tiene un grado de discapacidad del 37 por ciento. A mí me detectaron el trastorno cuando era un bebé al ingresarme por una infección de orina. Descubrieron que tenía una atrofia en el riñón izquierdo. Eso significa que es muy pequeño, prácticamente inexistente, y que no funciona. A eso hay que unirle problemas endocrinos, de tiroides y una arritmia que me detectaron este año. He tenido un fuerte empeoramiento en los últimos tiempos, así que mi médico del centro de salud me recomendó solicitar un grado de discapacidad". La administrativa ovetense esperará al próximo marzo para ver si recibe la citación de la Consejería de Bienestar Social del Principado.
