Los responsables de personal del ERA (Establecimientos Residenciales para Ancianos de Asturias) han comenzado a enviar cartas a los enfermeros de sus residencias en las que les informan de que se suspenden las vacaciones de Navidad de muchos de estos profesionales. Fuentes conocedoras de la situación aseguran que el caso se está repitiendo en todas las residencias de Asturias. En total, y sin que sean datos oficiales, se habrían suspendido las vacaciones de Navidad a alrededor de medio centenar de enfermeros.
"Debido a las necesidades del servicio surgidas y motivadas por la dificultad de encontrar personal de atención directa con la categoría de enfermero", se explica en la carta, "se le comunica la anulación de las vacaciones que tenía autorizadas para el periodo del 24 al 31 de diciembre de 2018 para garantizar el servicio manteniendo los efectivos mínimos establecidos en cada uno de los tres turnos". El ERA explica que "los candidatos (a cubrir los descansos) han rechazado los contratos ofrecidos".
La carta la han recibido los afectados con fecha del día 20 de diciembre, cuatro días antes del inicio de sus vacaciones, algo que critican especialmente, ya que "los trabajadores públicos estamos obligados a pedir las vacaciones antes del 31 de marzo, y así lo hacemos, pero la Administración no tiene problema en decirnos que nos suspende las vacaciones con tan pocos días de antelación".
Para los empleados de las residencias públicas de ancianos de Asturias no es un problema puntual, sino un grave déficit de organización de recursos, además de que "la gente no quiere trabajar en el ERA porque te llaman hoy para un contrato temporal de cuatro o cinco días que empieza mañana mismo", ejemplifican los trabajadores, que insisten en "una falta de organización total y continuada" que, en su opinión, ha llevado a los responsables de este recurso público "a no tener de dónde tirar para conseguir enfermeros". Son los propios trabajadores, confiesan, los que en muchas ocasiones tienen que buscar sustitutos entre conocidos para poder así disfrutar de sus días de descanso.
Memoria anual
Hace unos días, el ERA hacía pública su memoria anual, en la que aparecen los datos del año pasado. En ese informe se detalla que se atendió a 6.491 personas mayores en residencias y a 624 en centros de día durante el pasado 2017. Un total de 2.098 usuarios accedieron a los servicios de la entidad, el 65% de ellos mujeres, y se tramitaron 3.484 solicitudes, un 5,6% más que el año anterior: 2.286 para estancia definitiva, 809 para periodos temporales y 389 para centro de día.
La demanda de plazas psicogeriátricas creció un 27,20%, con 81 solicitudes, y 32 personas accedieron al sistema por orden judicial.
El año pasado se crearon 202 nuevas plazas residenciales, 50 de ellas psicogeriátricas concertadas, y 18 de centro de día, con las que el ERA ha pasado a gestionar un total de 5.538 puestos residenciales (3.417 públicos y 2.121 concertados) y 503 de centro de día.
Esta dotación ha permitido la apertura total de las residencias de Sotiello, en Moreda; Arriondas, en Parres; El Nodo, en Avilés, y Palacio de Villar, en Castrillón, así como la apertura completa del centro de día de El Nodo.
