La jubilación de José Antonio Argüelles, administrador de la Casa Sacerdotal de Oviedo, ha abierto una nueva etapa en la residencia de la Iglesia asturiana dedicada a atender a los curas en la última etapa de su vida. El Arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, ha iniciado contactos con la fundación Summa Humanitate para que les asesoren de cara a intentar profesionalizar la atención a los sacerdotes.
Fuentes del arzobispado dejaron claro, no obstante, que la colaboración con Summa Humanitate no supone ningún cambio en la titularidad de la residencia. La Casa Sacerdotal seguirá siendo de la Iglesia Asturiana y continuará asumiendo la dirección y la administración de la residencia.
Al menos ese es el itinerario previsto en este momento: que la fundación Summa Humanitate asesore al Arzobispado de Oviedo en los primeros pasos de la casa sacerdotal, ya sin su administrador actual, que cesa en el cargo con su jubilación. En ese nuevo camino, y por más que la dirección y la administración sigan recayendo directamente en la comunidad eclesiástica, la intención es cambiar algunas cosas e intentar mejorar la gestión de la Casa Sacerdotal.
En la residencia instalada en la calle San José de Oviedo residen en la actualidad 48 sacerdotes y un conjunto de religiosas ayudan en buena parte de las labores diarias.
La actividad de los sacerdotes residentes en el centro es muy diversa. Los que tienen la salud más delicada cuentan con la zona de enfermería de la Casa Sacerdotal. Otros viven buena parte del tiempo en sus habitaciones. También están los curas que comparten vida y actividad en el edificio y fuera de él, compartiendo actividad con parroquias cercanas u otras comunidades cristianas.
Librería Diocesana
La Casa Sacerdotal de Oviedo alberga en sus instalaciones alberga en sus instalaciones la Librería Diocesana, y sirve de lugar de reunión para la Provincia Eclesiástica. También es sede de grupos cristianos y formación del clero.
Entre sus residentes más ilustres, la Casa Sacerdotal acogió en una de sus habitaciones al Papa Juan Pablo II en su visita a Asturias de 1989. Allí reside en la actualidad y desde su jubilación el arzobispo emérito Gabino Díaz Merchán, que el próximo 26 de febrero cumplirá 93 años de edad.
