Nada de dar golpes en la espalda a quien esté intentado liberarse de algo que obstruye sus vías respiratorias y nada, tampoco, de hacer el boca a boca a una personas que haya caído desplomada por un paro cardíaco. Para enseñar cómo actuar ante un atragantamiento o una parada del corazón, Cruz Roja Oviedo está impartiendo con gran éxito de participación y en colaboración con el área de Educación, Deportes y Salud del Ayuntamiento de Oviedo, varios talleres que se prolongarán hasta el próximo mes de junio, y que se están impartiendo colegios y centros sociales. Florencio Fernández, referente de Salud de Cruz Roja Oviedo, es el encargado de dar las pautas a niños y adultos. Ayer la cita fue en el centro social El Llano, junto a Ules. "Son cuestiones que preocupan mucho a la gente, y hay un gran desconocimiento o también falta de renovarse, porque los protocolos de actuación se modifican cada cinco años", explica.

La muerte por atragantamiento de un niño asturiano que se asfixió comiendo las uvas en Nochevieja ha desatado las alarmas. "Es increíble ver cómo los niños se implican en los talleres, y es que todo el mundo puede salvar la vida a otra persona si sabe cómo actuar en estos casos", concreta Fernández. Desde Cruz Roja aconsejan hacer la maniobra de Heimlich en caso de que a la persona atragantada le falte el aire, y recomiendan que haya personas que sepan utilizar los desfibriladores para que éstos se usen cuando se den paros cardiacos, "y siempre llamar al 112", señala Fernández.