"Mi libro es como esas viejas casonas con goteras y hiedra; detrás de los personajes están distintas facetas de mi vida". Así lo dijo ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA Luisa Navia-Osorio, autora de "Los agujeros de gusano", una novela en la que relata el fin de una era a través de protagonistas de ficción ambientados en Oviedo.

Luisa Navia-Osorio, licenciada en Ciencias de la Información, estuvo acompañada por Javier Cuervo, redactor jefe de LA NUEVA ESPAÑA, y el escritor y poeta Jaime Herrero, que coincidieron en destacar el carácter netamente ovetense del libro, editado por Luna de Abajo.

"Sé lo que incomoda leer las novelas de los conocidos; en ellas el autor se desnuda en los escritos", indicó la escritora, que debuta con un libro en el que aconsejó no buscar una segunda lectura. "No pude evitar introducir símbolos; el título ya lo es: los agujeros de gusano son un atajo en el espacio y en el tiempo y representan la estructura circular de este libro".

Javier Cuervo destacó el carácter divertido de Luisa Navia-Osorio, a la que definió como "divertida de verdad y muy inglesa, de las que saben llevar unas katiuskas verdes con barro con toda naturalidad". Jaime Herrero también hizo hincapié en el "oviedismo" de Luisa Navia-Osorio.

"En realidad, todos los que estamos aquí somos hijos de ese Oviedín del alma, mal que nos pese", recalcó Herrero, en referencia al numeroso público que llenó la sala para acudir a la presentación.

Según la autora, la novela retrata el fin de una era y aborda la historia de nuevas ricas aburridas de tenerlo todo que sueñan con ser 'it girls'; empresarios campechanos que creen ser mejores que los anteriores porque invitan a sidras a sus empleados explotados; aristócratas venidas a menos que miran hacia otro lado; jóvenes escritores ricos y sin talento que se suben al carro del asturianismo para estar subvencionados y limpiar su vergüenza de clase; sindicalistas y mineros que, como "Robin Hoods" enloquecidos, roban a ricos y a pobres.