Si hay un espacio con potencial para cambiar una zona fundamental en la ciudad es el área de El Cristo-Buenavista, cuya reordenación implicará la transformación de la parte alta de la ciudad en un espacio integrador, sostenible y pensado para las personas. El Alcalde, Wenceslao López, ha hecho de este proyecto uno de los principales ejemplos de colaboración institucional, ya que en el diseño del futuro de esta zona emblemática de la ciudad trabajan tanto Ayuntamiento de Oviedo como Gobierno del Principado. Algunos de los nuevos usos ya se han puesto en marcha y otros están en fase de realización, si bien todavía queda por afinar el conjunto de actuaciones.
Uno de los pilares sobre los se plantea el futuro del área es dar respuesta a las demandas vecinales. Para ello, el Ayuntamiento lideró un proceso de participación en el que más de 500 ovetenses aportaron ideas sobre equipamientos, actividad en la zona o usos temporales, entre otras cuestiones. Posteriormente, la resolución del concurso de ideas, en octubre de 2017, supuso un punto de inflexión fundamental para recuperar una zona de más de 260.000 m(2), una pieza clave en la vertebración del centro, ocupada en su mayor parte por el antiguo complejo hospitalario.
"¡Hucamp!, la campa de todos", el proyecto ganador, plantea la creación de un nuevo distrito verde de usos mixtos, con una mayor densidad y diversidad de usos, reconectado con la trama urbana y el centro de Oviedo a través de un eje peatonal y ciclista. "Ahora tenemos un dibujo de línea gruesa que integra las principales reivindicaciones y propuestas vecinales e institucionales", aseguraba en ese momento el regidor ovetense.
La comisión de seguimiento del proceso, integrada por Ayuntamiento y Principado, ha dado muchos pasos y seguido de cerca la planificación de las intervenciones en la zona. Uno de los proyectos ejecutados es el parque del Truébano, una zona verde recuperada para uso vecinal en el entorno del helipuerto del antiguo HUCA. El Principado ha instalado zonas infantiles y pistas deportivas, con una inversión de más de cien mil euros, que contarán con una nueva fase para acondicionar la zona en torno al helipuerto y que sirva como anfiteatro.
Otro de los proyectos con la tramitación iniciada es la puesta en marcha del centro social, una larga demanda vecinal dentro de los usos provisionales para iniciar la recuperación de este espacio de la ciudad. El proyecto será realizado de forma coordinada por las concejalías de Infraestructuras y Servicios Básicos y de Atención a las Personas e Igualdad, que dirigen las ediles Ana Rivas y Marisa Ponga, respectivamente.
Para este centro, existe una partida reservada en el presupuesto para instalar un edificio modular, con 254 metros cuadrados construidos en una sola planta, en el solar que el traslado del HUCA dejó en desuso. El equipamiento contará con salas de lectura y juegos, así como espacios para talleres y cursos y una zona polivalente.
El centro social servirá, además, como experiencia piloto para implantar un nuevo enfoque de ese tipo de equipamientos, con la oferta de servicios municipales que actualmente no se prestan en estas instalaciones y con un contenido de carácter intergeneracional abierto a toda la ciudadanía.
Recuperación de la plaza de toros
De forma paralela, el Alcalde ha dado un paso fundamental para la recuperación de la plaza de toros, con la solicitud de rebajar la catalogación de Bien de Interés Cultural "singular a especial" para poder recuperar este equipamiento para uso público una vez rehabilitado. Según ha puesto de manifiesto en distintas ocasiones, se trata de "poner en valor un patrimonio arquitectónico histórico que debemos conservar y no destruir". Entre las propuestas para este equipamiento emblemático, con más de dos décadas de abandono y once años cerrado, está convertir la plaza en un espacio multiusos, con capacidad para al menos 5.000 personas y la instalación de una cubierta.
