El polígono del Espíritu Santo cuenta desde hace apenas dos semanas con el principal laboratorio de Aqualia en España. La empresa de aguas invirtió 2,5 millones de euros para acometer unas obras de nueve meses con las que ha aumentado de manera considerable su capacidad para vigilar la calidad del agua corriente y las aguas fecales que gestiona en toda España.

Si bien Aqualia cuenta con siete laboratorios repartidos por todo el país, con esta inversión el de Oviedo se convierte en la referencia. El motivo: la adquisición de varias máquinas muy costosas y modernas, cuyo fin será alcanzar las 280.000 determinaciones analíticas al año a partir de muestras llegadas cada día de diferentes puntos de la geografía española.

El laboratorio cuenta con una plantilla de 16 personas especializadas, de las que un 75% son mujeres. Su objetivo es controlar los alrededor de 300 parámetros estudiados para garantizar la calidad del agua suministrada y recogida de los hogares de muchos municipios asturianos, entre los que se encuentra Oviedo desde el año 1996. "Hemos realizado un gran esfuerzo humano, técnico y económico para adaptar el laboratorio a la nueva normativa y dotarle de una dimensión tal como para prestar el mejor servicio a los ciudadanos de Oviedo", explicó el director nacional de Aqualia, Santiago Lafuente, durante el acto de inauguración.