Sábado de suerte lotera en Oviedo. Dos administraciones de la ciudad, la número 27, en la calle Juan Ramón Jiménez, junto a la plaza Pedro Miñor, y la número 31, en la calle Río San Pedro, conocida como La Paloma, repartieron ayer más de 700.000 euros correspondientes al primer y segundo premios de la lotería nacional.
Paradójicamente fue el segundo premio el que repartió más fortuna. En La Paloma se vendieron cinco series y se repartieron 600.000 euros en premios. En el despacho de la calle Juan Ramón Jiménez, el del primer premio, despacharon "dos o tres décimos", calculan sus responsables, un máximo de 180.000 euros. No hubo rastro de los premiados, nadie se acercó hasta la administración con su boleto. Sin embargo, un hombre llamó desde Gijón a La Paloma, para certificar su buena suerte. Es la segunda vez que le toca la lotería en menos de un año comprando décimos en el despacho de las hermanas González Rozada. Ayer, 24.000 euros.
Los números 12.541 y 87.014 fueron los que trajeron ayer la suerte a la capital asturiana. Marta Paredes, lotera de la administración 27, asegura que, aunque el premio no ha sido mucho "porque no era un número de los abonados, estamos muy contentas, no hay mejor publicidad para el negocio que repartir suerte".
Rebosantes de alegría estaban las hermanas Carmen y Marián González Rozada. No se reparten 600.000 euros todos los días, por eso no daban crédito cuando el agraciado por segunda vez en menos de un año les llamó para contarles que repetía suerte.
Este hombre cobró en julio del año pasado 120.000 euros, gracias a dos décimos del primer premio de la lotería nacional que había comprado en La Paloma. Ayer, con dos boletos del segundo premio, logró 24.000 euros. "Estamos contentísimas", repetían las hermanas González Rozada una y otra vez. Dicen las loteras que se sienten satisfechas por haber repartido fortuna entre sus clientes, aunque admiten que ellas también compran. "Pero siempre elegimos el que no toca", algo que no les resta ni un ápice de ilusión para seguir jugando y continuar al frente del negocio. Justo hace un año vendieron otro segundo premio y un primero, con los que repartieron siete millones de euros. Fue en el mes de julio.
Comenta Marta Paredes que "lo importante es que los clientes vean que la lotería toca, y que también lo hace en el barrio". Ayer, muchos vecinos de la zona de esta administración, ubicada muy cerca de la plaza Pedro Miñor, se acercaron a felicitar a la titular de la administración y a Marilis Velasco, que trabaja en ventanilla. Y ellas, con sonrisa permanente, agradecieron las muestras de cariño. Este primer premio también se vendió en Alicante, Barcelona, Guipúzcoa, Murcia, Baleares, Las Palmas, Madrid, Toledo y Valencia. Paredes, que heredó el negocio de sus padres hace seis años, recuerda que el mejor día fue "en 2013, cuando repartimos dieciocho millones de euros con un cuarto premio de la lotería de Navidad"
