Un conductor arrojó el miércoles en la avenida del Cantábrico un resultado de alcoholemia que cuadruplicó la tasa permitida. En concreto, 0,91 miligramos por litro de aire expirado. La Policía Local le interceptó hacia las 18.40 horas durante un control rutinario para verificar documentación de conductores y vehículos y comprobar los niveles de alcohol. A lo largo de la tarde, los agentes detuvieron en el mismo punto a dos personas y denunciaron a otras tres.

El segundo detenido era un hombre que carecía de permiso de conducir y tenía pendiente una orden de ingreso en prisión, por lo que fue remitido al Cuerpo Nacional de Policía para su traslado a la cárcel de Villabona.

Las tres denuncias se tramitaron por una ITV caducada, un permiso de conducir también prescrito y por viajar con menores sin sistema de retención infantil. En ese último caso el vehículo quedó inmovilizado porque el conductor a no pudo acreditar domicilio alguno en España.

La Policía Local realiza periódicamente controles de tráfico en diferentes zonas del municipio y en distintos tramos horarios. Algunos dispositivos están destinados a evitar los excesos de velocidad y otros a controlar las tasas de alcohol o drogas.