¿Qué ocurrió con el cráneo de Goya? ¿Dónde está la calavera del genio? Cuando en 1888 en el cementerio de Burdeos, donde fue enterrado en 1828, se exhumaron los restos de Francisco de Goya, se descubrió que al cadáver le faltaba la cabeza. El periodista y director de cine madrileño Samuel Alarcón conoció la historia de niño y nunca la olvidó. Mañana, domingo, será el encargado de cerrar la Semana del Audiovisual Contemporáneo de Oviedo (SACO) con su documental "Oscuro y Lucientes", en el que se adentra en el misterio y busca algunas respuestas.
- ¿Qué descubrimos en "Oscuro y Lucientes"?
-Con la exhumación de los restos de Goya se descubre que la cabeza ha desaparecido y ahí se abre una gran incógnita en la historia. He hecho un documental de creación. La historia daba para un relato policial y, como en toda película policiaca, tratamos más de equilibrar las hipótesis que de afirmar verdades. Lo único que pretendo es acompañar en sus dudas.
- Hay varias hipótesis sobre el destino del cráneo, y una de ellas dice que lo tuvo durante años el pintor asturiano Dionisio Fierros.
-Fierros tenía una calavera en su estudio y pintó una obra de una calavera sin mandíbula y por detrás pone "El cráneo de Goya". Nunca se supo si era verdad porque el cuadro se descubrió cuarenta años después de la muerte de Fierros.
- Otra teoría apunta a la frenología.
-Ahora se considera la frenología una pseudociencia, pero en aquella época tenía mucho éxito. Entonces era una ciencia que sirvió para validar el tráfico de personas al entender que los negros eran más proclives a ser esclavos por la morfología de su cráneo.
- ¿Qué supondría entonces poder estudiar el cráneo de un genio?
-Se ha dicho que el propio Goya o su familia podrían haber donado aún en vida la cabeza a la ciencia. No es la única que ha desaparecido, también se perdió el cráneo de Haydn.
- ¿Qué fue lo que más le impresionó del proceso de documentación y de rodaje de la película?
-Pudimos rodar la muerte de Goya justo en la habitación en la que él murió, en el Instituto Cervantes de Burdeos. Y pudimos rodar el funeral en el mismo lugar en el que se celebró. Después del largo proceso de investigación para el documental, esos momentos fueron muy emocionantes.
