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El funcionario encargado alerta de que la reparación del Tartiere resulta urgente

El técnico ha pedido que se le exima de seguir con el expediente ante la animadversión que aprecia en el arquitecto que hizo el proyecto rechazado

El funcionario consistorial encargado del contrato para la reparación de la estructura del Carlos Tartiere alerta en sus informes de que la actuación en el estadio es urgente y que debe abordarse sin mayor dilación. Pese a ello, insiste en que el plan presentado por el arquitecto al que se le adjudicó el proyecto no puede ser aceptado por el Ayuntamiento, debido a que las numerosas y graves carencias que presenta lo convierten en irrealizable.

Según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA, este empleado municipal, adscrito a la concejalía de Infraestructuras, dirigida por Ana Rivas (PSOE), ha solicitado a sus superiores que le eximan de seguir interviniendo en el expediente, al apreciar una animadversión manifiesta por parte del arquitecto, quien ha conseguido que el Defensor del Pueblo inicie una investigación sobre el bloqueo a la actuación, que se extiende desde hace año y medio. El funcionario sostiene que sus informes negativos hacia el proyecto siempre se han basado exclusivamente en cuestiones técnicas y que no hay nada personal en su posicionamiento.

Las graves deficiencias en la estructura del Tartiere fueron desvelada a finales de 2016 a través de un informe de Ingenieros Asesores de Construcción. El documento daba cuenta de un cúmulo de desperfectos en la estructura, muchos apreciables a simple vista y la mayor parte ocasionados por una "inadecuada conservación durante los primeros años de vida" del estadio, que coincidieron con la etapa más oscura de la historia de club azul. Los especialistas de Ingenieros Asesores recomendaron "obras de reparación de todos y cada uno de los elementos estructurales del inmueble cualquiera que sea su ubicación", con trabajos en la estructura de las vigas, pilares, muros, forjados de hormigón armado y prefabricado de los paneles de fachada, acero estructural, cerchas, celosías y tirantes de la cubierta, incluyendo los anclajes y las uniones".

Las obras más urgentes deberían ejecutarse en el plazo máximo de un año, en 2017, con un presupuesto estimado entonces en unos 90.000 euros. A partir de ahí, el calendario diseñado para completar todos los trabajos se extendía a lo largo de cinco años, sin que hasta la fecha se haya ejecutado actuación alguna, lo que, para los técnicos, agrava el riesgo de que los desperfectos vayan a más. El proyecto encargado al arquitecto que ha pedido amparo al Defensor del Pueblo no ha pasado el filtro técnico y el profesional no ha conseguido que el Consistorio le pague el trabajo.

En esta tesitura, los rectores del Real Oviedo ya solicitaron por escrito a la Concejalía de Infraestructuras un certificado de la "idoneidad estructural" del Carlos Tartiere, con el objetivo de garantizar que "no se produzcan en el edificio, o partes del mismo, daños que tengan su origen o afecten a la cimentación, los soportes, las vigas, los forjados, los muros de carga u otros elementos estructurales y que comprometan la resistencia metálica y la estabilidad del edificio".

Además, el club también pidió al departamento de Ana Rivas "un certificado de seguridad de utilización" del estadio municipal de la Ería.

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