La fábrica de armas de Trubia vive momentos de tensión laboral a causa de las sanciones impuestas por la dirección a tres encargados que la plantilla considera injustas y desproporcionadas. Fuentes del comité de empresa confirmaron ayer a este diario que mañana se decidirá si los trabajadores emprenden movilizaciones y paros parciales para tratar de forzar una rectificación de los responsables de la planta.

Según reconocen trabajadores de la fábrica, el malestar por las sanciones a estos encargados es patente en la plantilla. Sin embargo, y aunque el viernes ya se produjeron actos simbólicos de protesta, el comité todavía no ha decidido si se organizarán más paros parciales u otro tipo de movilizaciones.

Los representantes sindicales consultados declinaron hacer comentarios oficiales hasta que no se tomen decisiones concretas.