Jesulín de Ubrique se despidió de los ruedos el 21 de septiembre de 2007 en la plaza de toros de Oviedo. Compartió cartel con Manuel Díaz "El Cordobés" y Francisco Rivera Ordóñez. También fue el último día que el coso de Buenavista estuvo abierto. El diestro volvió a ponerse el traje de luces tres años después en Castellón, pero las instalaciones ovetenses siguen cerradas con la maleza creciendo en su interior. Aquella tarde se lidiaron toros de la ganadería Peralta y Las Monjas. Hubo tres cuartos de entrada y "El Cordobés" y Rivera salieron a hombros. Especialmente aplaudidos fueron Jesulín y "el Cordobés". El primero porque ponía punto y final a su carrera profesional (aunque fue un punto y seguido) y el segundo por mostrar al respetable sus "efectos especiales" en la arena (saltos de rana, cabriolas, adornos y una estocada final que acabó con el animal). Rivera Ordóñez arrancó la ovación del público con sus muletazos y el manejo de las banderillas. El Ayuntamiento patrocinó el espectáculo con la compra de localidades -siempre las de sol- para distribuirlas gratuitamente a los centros sociales y juveniles. Era algo habitual durante la programación taurina. Gabino de Lorenzo era el Alcalde. A los pocos días, declaró las instalaciones de Buenavista en ruina, a la espera del desarrollo del plan urbanístico del entorno del viejo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), que entonces aún estaba en funcionamiento.