Los vigilantes de seguridad privada de Asturias acusan a la Asociación de Serenos, Controladores de Accesos y Conserjes de Oviedo de ejercer su actividad ilegalmente. "No se encuentran habilitados por el Ministerio del Interior, ni están formados ni capacitados al carecer de autorización para el ejercicio de funciones profesionales relacionadas con la seguridad ciudadana", afirma el colectivo, agrupados en la asociación Avispa (Asociación de Viigilantes de Seguridad Privada de Asturias).

La Asociación de Serenos había exigido esta semana la paralización del proceso de adjudicación y contratación de cuidadores de barrio iniciado por el Ayuntamiento al considera que se trata de un procedimiento alegal y que el servicio ya existe. Nueve personas realizan hoy en día el servicio de vigilancia nocturna sufragado íntegramente por comerciantes y vecinos, sin ningún coste municipal y con el visto bueno del Ayuntamiento.