Los cientos de vecinos que a diario utilizan una docena de senderos creados por los propios peatones para desplazarse por el entorno del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), quieren que Gispasa, el organismo encargado de la gestión de las infraestructuras del centro sanitario, los adecente para mejorar el tránsito por la zona.
La propuesta llega después de que el Ayuntamiento de Oviedo la desechara. La vecina de La Corredoria y trabajadora del hospital, Alegría Aira, fue quien tuvo la idea de recurrir a los presupuestos participativos de 2019 para buscar una solución a los charcos y falta de mantenimiento de las zonas verdes donde se ubican estos caminos creados a base de pisadas. El respaldo a la idea fue total hasta el punto de convertirse en la medida con más apoyos al reunir 362 votos.
Sin embargo, los técnicos municipales tumbaron las ilusiones de unos caminantes que ya veían cerca su aspiración de caminar por unos senderos dignos. Los funcionarios descartaron que el proyecto pasara a la siguiente fase alegando que los terrenos eran de propiedad regional y por tanto no era de su competencia acometer el arreglo. Al mismo tiempo se comprometieron a que el Ayuntamiento pediría a la administración correspondiente que estudiase afrontar la actuación solicitada.
Apoyo asociativo
Pasado ya más de medio año desde aquella negativa, los vecinos fijan ahora sus objetivos en Gispasa. "Si son los responsables deberían hacer algo porque es una demanda que está ahí", explica Alegría Aira, quien está intentando que las asociaciones vecinales del barrio de La Corredoria respalden su propuesta. "Cuanta más gente y colectivos lo respalden más fácil será que lo consigamos", comenta la mujer, esperanzada de poder acudir caminando al trabajo sin meterse en charcos.
