Los niños del Colegio de la Inmaculada, dirigido por la orden de las Claretianas, se sumaron ayer en pelotón a la Vuelta Junior Cofidis. Se trata de un proyecto pedagógico impulsado por varias entidades comprometidas con el ciclismo, que busca introducir a los más pequeños en este deporte al tiempo que aprenden normas básicas sobre seguridad vial y hábitos de vida saludable.

La jornada discurrió sobre ruedas. La primera sorpresa de los pequeños fue encontrarse con que el encargado de dirigir las actividades era Santi Pérez, el ciclista moscón que fue profesional durante doce años y que llegó a quedar segundo en la Vuelta a España del año 2004. El deportista asturiano comenzó reuniendo a los niños en el salón de actos, para ofrecerles una pequeña charla sobre seguridad y algunos consejos para salir en bicicleta. "Nos ha dicho que es obligatorio utilizar casco y que hay que indicar con el brazo cualquier giro que vayas a hacer para que no te atropellen los coches", afirma Luhana Liset, una de las participantes. A continuación, los alumnos salieron al patio para recibir una clase práctica. Todos ellos se subieron a la bicicleta para participara en una serie de pruebas de equilibrio y habilidad.

Las actividades de la Vuelta Junior Cofidis se desarrollan en todos aquellos lugares en los que hay un final de etapa de la Vuelta a España. En el caso de Oviedo, los ciclistas profesionales llegarán a la calle Uría el próximo día 7 de septiembre, por lo que en el municipio hay 14 colegios que van a tomar parte en el programa. "Son entre 2.500 y 3.000 niños. Estas iniciativas también se desarrollan en Francia e Italia en torno al Tour y al Giro. La verdad es que es una satisfacción", dice Santi Pérez.

Además, alrededor de 150 niños de todos los centros participantes serán seleccionados para vivir una experiencia única. "El día que la Vuelta llegue a Oviedo, una hora antes del comienzo de la etapa, se les prestarán bicicletas y se les regalará todo el equipo necesario para que puedan salir a la carretera y cubrir los últimos dos kilómetros de la etapa. Irán custodiados por coches oficiales y al final compartirán el podio con los profesionales", añade el ciclista moscón.