Los Bomberos de Oviedo tuvieron que actuar ayer para ayudar a una mujer que se había quedado encerrada en una habitación de su casa -se rompió la manilla de la puerta- mientras su nieta de 18 meses se encontraba en el salón viendo dibujos animados en la televisión. Los hechos ocurrieron en un edificio situado en el número 7 de la calle Marqués de Pidal.

La mujer se puso nerviosa porque la niña estaba sola y consiguió avisar a los servicios de emergencia, que acudieron al rescate. Los bomberos trataron de entrar al domicilio por la puerta, pero la propietaria había dejado puestas las llaves por dentro y les fue imposible hacerlo. Fue entonces cuando decidieron utilizar una autoescalera para entrar al piso, un cuarto, rompiendo uno de los cristales de la terraza. Al final la niña seguía viendo los dibujos y todo se que quedó en un susto.