Iván G. G., el hombre de 38 años acusado del atropello mortal de Mamel Castañón, a las 3.30 horas del domingo en la calle Argüelles y darse posteriormente a la fuga, quedó en libertad con cargos el mismo domingo, bajo la condición de pasarse una vez a la semana por las dependencias judiciales. Según anunciaron ayer fuentes del TSJA, al presunto delincuente se le imputan delitos de homicidio imprudente, conducción temeraria y abandono del lugar del accidente, si bien esta tipificación podría cambiar a lo largo del periodo de instrucción del caso.

Aunque fuentes policiales apuntan a que el acusado negó ser el conductor del vehículo tras su detención, a las nueve de la mañana, en la puerta de su casa de Vallobín, una vez puesto a disposición judicial se acogió a su derecho a no declarar. La magistrada encargada del caso dictó entonces un auto por el que decretaba, como ya adelantó ayer LA NUEVA ESPAÑA, su libertad con cargos, aunque eso sí, con la condición de comparecer una vez en la semana en el Juzgado de manera obligatoria hasta que se juzguen los hechos.

El mismo auto incluye también medidas como la retirada del carné de conducir y el permiso de la circulación, la intervención del Honda Civic con el que se produjo el atropello y el depósito del mismo a disposición del Juzgado de instrucción.

Fuentes de la investigación señalan igualmente que la Policía Local le practicó tanto un control de alcoholemia como de consumo de otras sustancias. El resultado fue trasladado al juez, a pesar de que todo apunta a que no serán tenidas en cuenta, puesto que el arrestado habría seguido de fiesta después del atropello y por tanto no podría acreditarse que los consumos tuviesen lugar antes de que se produjera el suceso.

Este diario volvió a ponerse ayer en contacto con el acusado, como ya hiciera el mismo domingo, para preguntarle por su versión de los hechos. De nuevo, Iván G. G., conocido popularmente en el barrio de Vallobín como "Pichurry" señaló que su decisión era la de guardar silencio a la espera del avance del proceso judicial.

A pesar de su paso por el Juzgado y su posterior puesta en libertad con cargos, Iván G. G. vivió el resto del domingo con total normalidad o al menos eso intentó aparentar. El detenido llegó incluso a realizar una publicación jocosa en uno de sus perfiles en las redes sociales sobre las elecciones europeas, autonómicas y municipales con una imagen y un juego de palabras sobre el "Vota fumeiro, el único candidato que reconoce vender humo", lo que incluso hizo dudar a algunos amigos sobre su supuesta implicación en el suceso nocturno. Tras fallar su intento de mostrar normalidad, el detenido cerró ayer la cuenta desde la que hizo la publicación.