La fotografía no está tomada en un suburbio de cualquier ciudad peligrosa sino en plena avenida Presidente Adolfo Suárez, a escasos metros del Hospital Universitario Central de Asturias. Los usuarios del centro y algunos vecinos del entorno ya están hartos de la "imagen penosa" que ofrece este vehículo completamente destrozado y lleno de pintadas. El coche se encuentra en una parcela que es propiedad de una comunidad de vecinos y lleva en ese estado "más de dos años por lo menos".