Prevención, diagnóstico precoz y mantener una actitud de diálogo son tres de las claves que la Fundación Movember considera importantes para frenar las altas tasas de cáncer masculino, y, de paso, contribuir a rebajar el número de suicidios en hombres.

El Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA acogió ayer un acto enmarcado en la campaña que todos los meses de noviembre desde 2003 lleva a cabo la Fundación Movember, de origen australiano, y hoy extendida por todo el mundo. Asturias no es una excepción. El ovetense Gerardo Albornoz García-Bernardo es el embajador en España de la entidad, cuyo símbolo es un mostacho o bigote, que trata de hacer ver que los varones también tienen una salud frágil y, de hecho, viven de promedio, seis años menos que las mujeres, tal como explicó Gerardo Albornoz.

Miguel Hevia Suárez, responsable del equipo quirúrgico de trasplante renal en el HUCA y profesor asociado de Urología en la Facultad de Medicina de Oviedo, se refirió a la incidencia del cáncer de próstata, tan prevalente como el de mama que afecta a la mujer, pero menos visible. "El cáncer de mama ha tenido más trascendencia. La mujer se preocupa más por sus revisiones y expresa más lo que le pasa", indicó. Hevia anunció avances en el diagnostico ligados al big data y a la inteligencia artificial. También habló de la terapia focal experimental como otra de las nuevas formas de combatir la enfermedad.

Emilio Esteban, jefe de Oncología del HUCA, lanzó un mensaje esperanzador sobre el tratamiento del cáncer testicular: "Incluso en pacientes con enfermedad más avanzada la quimioterapia cura el noventa por ciento de los tumores. Somos capaces de curar a poco precio, pero es muy importante la prevención, sobre todo en los jóvenes", señaló el oncólogo, que tampoco pasó por alto el trasfondo genético de la enfermedad.

La farmacéutica Mercedes Migoya, diplomada en Óptica y Optometría, resaltó lo difícil que es que los hombres cuenten lo que les pasa, y más aún que participen en charlas y reuniones informativas. "Al final acaban viniendo las mujeres; es algo cultural que debe cambiar". Susana Al Halabi, profesora de Psicología de la Universidad de Oviedo, abordó la delicada problemática del suicidio en los varones. "Camus decía que el único problema filosófico serio es el suicidio y algo de razón tenía; en el mundo hay uno cada 40 segundos". Al Halabi explicó que la intención de quitarse la vida procede de un drama existencial, que puede atajarse si el afectado tiene quien le escuche. "Los hombres de suicidan tres veces más que las mujeres", recalcó.