Los vecinos de la urbanización La Estrecha 46, situada muy cerca del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), están de enhorabuena. Después de "infinidad" de intentos y de "luchas burocráticas" sin resultado por parte de la comunidad, el Ayuntamiento de Oviedo ha retirado esta mañana el vehículo que llevaba diez años abandonado en la parcela privada del complejo. El coche, un Rover completamente destrozado, lleno de basura y de pintadas, se marchó montado en una grúa municipal ante la atenta mirada de unos vecinos que casi no podían creérselo. "Al fin lo conseguimos", dijo la vicepresidenta de la comunidad, Teresa García, mientras veía como el vehículo desaparecía para siempre.

La Policía Local le entregó a los vecinos el pasado día 16 de noviembre una resolución municipal en la que instaba a la comunidad a deshacerse del vehículo antes de siete días trasladándolo al Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos para su destrucción y descontaminación. La orden, que en realidad fue un trámite administrativo para beneficiar a los vecinos, se dictó por "razones de seguridad, salubridad y ornato público" a partir de un informe realizado por la unidad de Conservación y Policía Urbana.