"Creí que la política era otra cosa. Yo fui a Madrid con mi mujer, claro, faltaría más. Ella no quería que yo entrara en política. A veces va a muchos sitios sin querer, pero su obligación es mantener esa representatividad que le corresponde como esposa del Alcalde de Oviedo (...) Si yo vuelvo a Madrid y ella viene conmigo, esos gastos los va a pagar el Ayuntamiento". El Alcalde Alfredo Canteli, para acudir a la presentación del menú del Desarme en la capital española.

El Alcalde no sólo respondió a la duda planteada por Somos sobre la veracidad de esas facturas (que incluyen 537 euros por dos noches en una habitación doble de un hotel de cuatro estrellas, 170,81 euros por kilometraje, 52,10 euros por los peajes y 232,70 por manutenciones), sino que defendió haber cargado los gastos de su mujer y anunció que volverá a hacerlo. La oposición, con Somos a la cabeza, pidió su dimisión y anunció que lo llevará a los tribunales. Canteli se explicó durante el Pleno municipal sin escatimar en detalles, seguro de no haber cometido irregularidades:

"Fuimos al hotel donde vamos desde hace 35 años. Fue reservado por el Ayuntamiento, no por nosotros directamente. Era para dos noches. Es cierto, pero sólo se ocupó una. Salimos a las tres de la tarde, y comimos algo al salir del Huerna. Tomamos dos pinchos, dos cafés y unas pastas que compramos allí. Valían cinco euros. Viajamos a Madrid, ella se quedó en el hotel y yo fui a una cena que podía ser importante para Oviedo y que más adelante contaré. Mi mujer durmió conmigo en la misma cama como hacemos siempre. Son 49 años de casados. Al día siguiente, a las 9 de la mañana no me tenía derecho y eso que no había bebido porque yo no bebo. Me encontraba mal. Logré ir a la presentación del Desarme y logré intervenir, y me vi tan mal por la tarde que a las siete pedí que alguien me trajera el coche. A esa hora no podía anular la habitación. Pero hay facturas de que nosotros en Rueda (Valladolid) volvimos a tomar unos pinchos antes de llegar a Oviedo".

La portavoz de Somos, Ana Taboada, declaró a los medios de comunicación al término de la sesión que exigirá la dimisión inmediata de Canteli y le llevará a los tribunales por cargar al erario local gastos de su esposa - "una persona ajena al Ayuntamiento que no ha sido elegida por los ovetenses" - y por "confundir lo público con lo privado". Para Taboada, "Canteli ha demostrado osadía durante un Pleno bochornoso y un desprecio por lo público. Debe dimitir ya".

En el otro lado de la bancada, el del gobierno, y en un debate que mezcló "el tema mío" (como se refería a él el regidor durante el Pleno) con otros gastos de contratos menores, el concejal de Economía, Javier Cuesta, defendió la gestión del gobierno atacando a sus predecesores de despacharse con gastos similares a los que ahora les afea la oposición. Cuesta citó, entre otros, contratos menores por "chocolate y bizcochos, o varias comidas en múltiples ocasiones".

El PSOE, por su parte, también anunció que se reserva su derecho a "ejercer las acciones que estime oportunas" tras la segunda intervención del Alcalde. Canteli leyó diez folios en los que acusó al portavoz socialista y exalcalde, Wenceslao López, de mentir a lo largo de su trayectoria política y usó el tiempo reservado a la sesión de control, es decir, cuando la oposición puede plantear dudas o reprochar actuaciones. Comenzó hablando de los planes de mejora para la muralla medieval, a su juicio, en un "vergonzoso nivel de abandono por culpa del tripartito", para luego preguntar por el paradero del documento de compra de la Fábrica de gas por 4,5 millones de euros anunciado por el tripartito. También le hizo un reproche a López sobre el área metropolitana: "Me acusó usted de manifestar mi temor a perder la capitalidad. Nunca he dicho eso. Nadie tiene la menor duda de que Oviedo es la capital de Asturias y lo seguirá siendo (...) Es usted un ignorante o un mentiroso. O tal vez las dos cosas".

Acusaciones de racismo

Finalmente, Canteli remató su discurso respondiendo a las acusaciones de xenófobo y racista que López y la concejala socialista Ana Rivas le hicieron cuando cumplió cien días de mandato: "Yo selecciono a mis amigos sin mirar su condición sexual y tengo el máximo respeto a todas las tendencias. Tengo una gran relación con varios colectivos, como los venezolanos, evangelistas o chinos". Al término del Pleno, López mostró su "preocupación" por la conducta del regidor. "Demuestra una falta absoluta de cultura democrática", concluyó.